No se trata de una estrella, sino de la representación bidimensional de pirámides superpuestas. Estas pirámides indican las inclinaciones de la naturaleza humana. Hacia "arriba" tienden la inteligencia y la conciencia; hacia "abajo" tienden los impulsos y pasiones. La existencia humana discurre entre esos dos planos, armonizándolos.
Este es uno de los símbolos más antiguos que han llegado hasta el presente. Tuvo su origen en Asia Central, hace por lo menos 15.000 años.
Luego fue dispersándose por Sumeria, Egipto, Cannán... Desde hace 200 años fue convirtiéndose paulatinamente en símbolo sionista (Theodor Herzl).
Hoy, la Estrella de David es el más popular y universalmente reconocido símbolo del Pueblo Judío.
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